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miércoles, 16 de marzo de 2022

PLAZA DE LA CABEZA Y SU LEYENDA.

 

Esta plaza, como todas las de Toledo, es irregular. No existe en la ciudad ninguna plaza que forme un cuadrado o rectángulo regular, siempre uno de los lados es más grande que otro.

Está ubicada detrás de la catedral. Se la conoce popularmente con el nombre de Plaza de la Cabeza debido a una leyenda con desenlace dramático. Desde el año 1898 su nombre es Abdón de Paz, en recuerdo a un escritor del pueblo toledano de Polán. Este escritor vivió en esta plaza cuando estudiaba.

La leyenda nos cuenta cómo Fernando III “el Santo” mandó cortar la cabeza al Alcalde de Toledo, exponiéndola en esta plaza. Fernando Gonzalo era un alcalde déspota y autoritario que cobraba más impuestos de los que estipulaba la ley, llevaba a cabo medidas injustas y amenazaba a las mujeres más bellas si no accedían a sus favores más lascivos.

Una mujer, a la que el alcalde secuestro a sus hijos para que accediese a acostarse con ella, le denunció ante el rey en una audiencia que el rey Fernando dio en Zocodover. Todos los ciudadanos secundaron su denuncia, aportando pruebas por las barbaridades de este energúmeno, por lo que el rey de forma inmediata le ejecutó y expuso su cabeza en esta plaza, para que todos los ciudadanos fuesen conscientes de que su Rey siempre defendía a los más justos, condenando a los miserables.

En esta calle confluyen calles interesantes con curiosas historias:

CALLE DEL LOCUM. Locum significa “lugar” en latín. La calle se llama así porque frente a esa calle está la puerta de la catedral que daba a los urinarios que utilizaban los clérigos. De forma discreta decían: “voy al locum”, para referirse a que iban al lugar donde hacían sus necesidades más básicas.

CALLE DEL CRISTO DE LA CALAVERA. Llamada así porque en el siglo XVII había un Cristo con una calavera a los pies, lo que era bastante común en esta época. Si os gustan las leyendas en esta calle está ambientada la famosa leyenda del Bécquer “el Cristo de la calavera”, que puedes leer en mi blog: https://descubretoledoconmanuel.blogspot.com/2019/09/becquer-y-la-leyenda-del-cristo-de-la.html

CALLE ROBADA. Hasta finales del siglo XIX había una cuarta calle que se cerró desapareciendo como calle y quedando un callejón de los más estrechos de Toledo. Es una de las famosas calles robadas de las muchas que hay en la ciudad.

CALLE JUAN LABRADOR. Antiguamente era frecuente poner el nombre de las calles a algún vecino ilustre que hubiese vivido en ella. En el siglo XVIII vivió en esta calle Juan Sánchez Labrador, famoso repostero toledano que vivió en esa calle, y cuyo obrador dio fama tanto a él como a sus herederos.

En esta plaza destaca un edificio de estilo barroco, que nos recuerda a un antiguo Palacio. Fue residencia del Canónigo Obrero de la Catedral. En el siglo XIX aquí estuvo la Escuela Normal de Magisterio. En el siglo XX fue residencia de ancianos primero y Residencia Femenina más tarde (la famosa RUF).




miércoles, 16 de junio de 2021

LA PLAZA DE LAS 4 CALLES EN EL TOLEDO MEDIEVAL.

Saliendo de Zocodover en dirección a la catedral, recorremos la conocida como calle del comercio, y llegamos a una pequeña plaza, de la que parten como si fueran puntas de una estrella, cinco calles y no cuatro como dice el rótulo de la calle. Este nombre es muy antiguo. Hay texto del siglo XIV que ya la nombraban así. 

Aunque lo más lógico es que su nombre se deba a que en algún momento tendría cuatro calles, esto no está comprobado. Durante algunos años se la llamó Rua Nova, para volver a nombrarla como actualmente.

En realidad, hasta el siglo XVIII no era una plaza como tal, pues había varios edificios en ella. En esa época se derribaron dos grandes inmuebles, convirtiéndose entonces en la actual plaza.

Este emplazamiento fue un gran centro mercantil y lugar de encuentro de muchos toledanos. Pero lo que más destacaba era la concentración de libreros. Había una librería emblemática que más tarde, en el siglo XX, fue la imprenta y papelería Serrano, conocida por todos los toledanos y estudiantes como yo.

En una reforma de esta librería se encontró una placa de principios del siglo XVII, en el que ya se le nombraba como “calle de las quatro calles”. Quizás ésta fuese una de las razones por la que se la siguió nombrando así.

La antigua librería fue muy importante, al ser la primera que expendió los primeros periódicos que llegaban desde Madrid a Toledo a través del tren.

Se sabe que a finales del siglo XVI también se llevaron a cabo en esta plaza algunos Autos Sacramentales pequeños, pero dejaron de hacerse debido a que la plaza es muy pequeña, y no cabía mucha gente, por lo que no eran todo lo ejemplarizantes que se pretendía.

Las 5 calles que parten de esta plaza son:

- La mencionada Calle Comercio o como también se la conoce popularmente, calle Ancha.

-La calle Chapinería, que da a la Puerta del Reloj de la catedral. Su nombre se debe a que aquí hubo muchas tiendas de chapines (zapato con suela gruesa de corcho o madera para protegerse del barro o suciedad de las calles, utilizado antiguamente sobre todo por mujeres).

- La calle Hombre de Palo que todavía hoy conserva el nombre que tenía en el siglo XVI. Se la llamó así porque un pequeño robot autómata, construido por el insigne y arruinado Juanelo Turriano recorría esta calle, pidiendo limosna. Antes recibió los nombres de Cal de Francos, Asaderías y Lonja.

- La calle Martín Gamero, en recuerdo al que fuera escritor, cronista de Toledo y director del periódico El Tajo.  En esta calle sigue abierta la única librería de la zona, la librería Hojablanca.

- La calle Cordonería, en referencia al gremio de los talleres de cordones que había en esta calle. 

Las fotos en blanco y negro pertenecen al blog https://toledoolvidado.blogspot.com/






jueves, 12 de diciembre de 2019

CURIOSIDADES DE LA PLAZA DE ZOCODOVER.

Zocodover es la plaza más emblemática de Toledo. Son muchos los acontecimientos que han pasado por sus ojos a largo de los siglos. Pero veamos algunas curiosidades sobre este espacio de encuentro y reunión.
EL NOMBRE. Su extraño nombre actual procede de la época musulmana, que es realmente cuando esta gran explanada puede ser considerada como plaza.
Aquí se celebraba un gran mercado de caballos, por lo que la denominaron “sūq ad-dawābb”, que traducido al castellano significa zoco o mercado de las bestias. Esta denominación se fue castellanización, lo que originó el actual nombre de ZOCODOVER.
Pero a lo largo de sus años esta plaza ha tenido otros nombres. Se la llamó “Plaza del Pozo”, porque en este lugar se situó uno, del que se proveía la población. También hay documentos que refrendan el nombre de “Plaza Real”, posteriormente se la denominó “Plaza Zocadeña”.
En 1813 las autoridades municipales acordaron que se llamase “Plaza de la Constitución”. El nombre actual de Zocodover viene de 1945, como así se puede ver en una placa situada encima del Arco que hay frente a la plaza.
PLANTA IRREGULAR. Las plazas de ciudades importantes como la de Madrid, Salamanca o Vitoria, entre otras muchas, tienen una planta regular y son de gran belleza estética. Zocodover es irregular, recordando a un pentágono enclavado entre dos grandes calles.
En la época de mayor grandiosidad histórica de Toledo, cuando era capital de España, los reyes Carlos I y Felipe II quisieron reformarla, para darle una forma similar a algunas de las ya mencionadas, incluso hubo un proyecto encargado a Juan de Herrera.
Pero no se llevó a cabo dicho proyecto, pues ambos monarcas toparon con la gran influencia de la Iglesia, la cual poseía ingentes beneficios económicos, procedentes de las rentas y los alquileres que obtenían de esta plaza, al ser propietaria de muchas de las viviendas colindantes.
EL CLAVICOTE. En Zocodover a veces se instalaba una especie de jaula o catafalto llamado “Clavicote”, cubierto en forma de cúpula, con una cruz verde encima y colocada sobre sillares de piedra. Aquí se metía y exponía el cadáver de las personas fallecidas que no tenían familiares ni recursos económicos para pagar su entierro.
El propósito era obtener a través de limosna, que se depositaban en los cepillos adosados al clavicote, el dinero suficiente para que posteriormente la cofradía de la Santa Caridad pudiese costear parte del entierro, y darles digna sepultura en un cementerio de su propiedad.
ACTIVIDAD. En esta plaza ha estado instalado el mercado durante muchísimos siglos, convirtiéndola en una plaza bulliciosa donde coincidían lazarillos, juglares, alcahuetas, comerciantes, meretrices, caballeros, gobernantes o mendigos.
En Zocodover se hacían negocios, se buscaba trabajo, se acordaban citas, se retaban y llevaban a cabo duelos, se hacían procesiones. Era lugar de intercambio de provisiones y enseres variados. Se celebraron Autos de Fe, ejecuciones públicas, corridas de toros, proclamas.
Se organizaron grandiosos desfiles para recibir a reyes, cardenales o reconocidos personajes que visitaban la ciudad. Se exponía a los delincuentes comunes y a los condenados por la Santa Inquisición.
Las 2 fotos antiguas que publico pertenecen al blog de Toledo Olvidado. En una de ellas se aprecia el mercado y en la otra cómo quedó la plaza durante la guerra civil, donde sólo se mantuvo en pie el Arco de la Sangre. La de color es mía y está hecha durante la fiesta del Corpus.